mayo 27, 2008

Aló, ¡Chemo!


Suena el teléfono. Contesto. Aló. Una voz con un dejito español empieza a hablar sobre unas promociones de alguna empresa de teléfonos. No le cuelgo. Me intriga esa voz. Se me hace conocida. Él se encarga de resolver el misterio: "Tú ya me conoces, soy Chemo del Solar". ¡Ajá! Y se manda con más blablablá sobre lo que pretende venderme. Se toma su tiempo, tiene mucho qué decir. Pienso en colgarle. Pero me alucino que es cierto, que el entrenador de la selección peruana de fútbol me ha llamado a mí, que quiere mi consejo, que me ruega decirle qué hacer con los jugadores sancionados, que me pide por favor le dé la alineación del sábado contra España... Hasta que por fin acaba su monólogo y se despide de alguna manera.

No puedo negar el ingenio de esta promoción de telemarketing. Imagino al equipo creativo en la agencia de publicidad:
-Chicos qué hacemos, la empresa nos dice que las personas no escuchan las promos por teléfono, ¡nos cuelgan!
-Y si les ponemos una música de fondo.
-¿Qué música?
-No sé... alguna de moda.

(Silencio)

-Tú... estás pensando algo, dilo.
-Estaba pensando... y si hacemos que quien hace la llamada sea una persona conocida, alguien famoso...
-Me gusta...
-Claro, alguien como... Chemo del Solar.



Foto: Fotbolizados.com

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Brother lo siento mucho pero eso que has escrito salio igualito en la revista somos hace meses, ahora ¿quién copio a quién?

Fernando dijo...

Me gustaría mucho si tuvieras la amabilidad de decirme en qué fecha, en qué número de la revista o quién lo escribió, para buscarlo. ¿Tú crees que yo le copie a alguien? ¿Y a la revista Somos? Espero que puedas contestar inquisidor Anónimo.
Te respondo así: si hay algo de lo mucho que odio en el mundo es la falta de originalidad y, peor aun, la mediocridad de hacer de eso una profesión. Y si todo está dicho, hay que copiar a los grandes para aprender de ellos. Está claro que éste no es el caso.